Amparín del Cuétare

«Recuerdo ver lavar a Amparín, del Cuétare, siempre con una sonrisa, y cepillando su cabello blanco al acabar. Se decía que si caían pelos en el agua, pasado un mes se convertían en anguilas.»

«Acuérdome de ver llavar a Amparín, del Cuétare, siempre con una sorrisa, y cepillando’l so pelo blanco al acabar. Dicíase que si cayíen pelos nel agua, en pasando un mes convertíense n’anguiles.»

Daniel Canga